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El verano está muy cerca y seguro que llevas todo el invierno fantaseando con ir a la playa y pararte frente al mar y al sol con tu mejor bañador. Si tienes la suerte de tener una playa cerca, disfrutala, pero incluso sin vivir cerca del mar puedes montar tu pequeña playa privada. Imagina pisar con tus pies descalzos la arena bañada por el agua templada de la piscina. ¿Suena terapéutico, verdad? Las piscinas de arena son la clave para disfrutar de un verano mediterráneo y hoy te hablaremos de cómo conseguirlo.

Hace un tiempo, estas piscinas, al ser un tipo de elemento de lujo, solo eran exclusivas de parques acuáticos y hoteles de lujo, pero poco a poco se han convertido en una tendencia con una gran demanda y popularidad. Actualmente es mucho más fácil y hay muchos más recursos para recrear una piscina paradisíaca en tu propio hogar.

Las principales características de las piscinas de arena

Las piscinas de arena suelen tener formas redondeadas y suaves para simular la forma del mar. Además, por el mismo motivo, las piscinas de arena tienen una profundidad gradual para que a la hora de entrar en la piscina lo hicieras como si se tratara de una playa. Así mismo, para que la experiencia sea más similar aún a una playa, las piscinas de arena se pueden diseñar con cierto paisajismo. Por ejemplo, rocas y cascadas que crean un espacio relajante.

El material del que se construye esta clase de piscinas es principalmente hormigón gunitado ya que es una clase de material con una gran facilidad de adaptación, su resistencia y su impermeabilidad. Por encima de este material se aplica un revestimiento de arena compactada para darle ese acabado de playa natural. Se trata de una arena que da un aspecto continuo y suave a la piscina y que se adhiere al hormigón.

El mantenimiento de la piscina de arena es casi el mismo que el de las piscinas tradicionales, por lo que no deberás darle ningún cuidado especial o complejo. Deberás mantener la limpieza e higiene del agua igualmente y con la misma frecuencia. Lo especial de la construcción de estas piscinas es que su diseño se puede adaptar a la perfección a cualquier tipo de espacio y terreno que tenas ya que puedes escoger la profundidad a tu gusto. Aún estás a tiempo de preparar tu piscina de arena para el verano, ya que su construcción tarda tan solo 30 días.

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